DÍA 4: MISERICORDIA Y REDENCIÓN
Versículo clave
17 Entre tanto, el Señor había provisto que un gran pez se tragara a Jonás; y Jonás estuvo dentro del pez durante tres días y tres noches.
Jonás 1:17
Lectura
1 El Señor habló por segunda vez a Jonás: 2 «Levántate y ve a la gran ciudad de Nínive y entrega el mensaje que te he dado». 3 Esta vez Jonás obedeció el mandato del Señor y fue a Nínive, una ciudad tan grande que tomaba tres días recorrerla toda 4 El día que Jonás entró en la ciudad, proclamó a la multitud: «Dentro de cuarenta días Nínive será destruida». 5 Entonces la gente de Nínive creyó el mensaje de Dios y desde el más importante hasta el menos importante declararon ayuno y se vistieron de tela áspera en señal de remordimiento. 6 Cuando el rey de Nínive oyó lo que Jonás decía, bajó de su trono y se quitó sus vestiduras reales. Se vistió de tela áspera y se sentó sobre un montón de cenizas. 7Entonces el rey y sus nobles enviaron el siguiente decreto por toda la ciudad: «Nadie puede comer ni beber nada, ni siquiera los animales de las manadas o de los rebaños. 8 Tanto el pueblo como los animales tienen que vestirse de luto y toda persona debe orar intensamente a Dios, apartarse de sus malos caminos y abandonar toda su violencia. 9 ¡Quién sabe!, puede ser que todavía Dios cambie de parecer, contenga su ira feroz y no nos destruya». 10 Cuando Dios vio lo que habían hecho y cómo habían abandonado sus malos caminos, cambió de parecer y no llevó a cabo la destrucción con que los había amenazado.
Jonás 3:1-10
Dios proveyó un gran pez para salvar a Jonás, demostrando Su misericordia y poder para redimir. Reflexiona sobre la misericordia de Dios en tu vida y su capacidad para redimirte incluso de las situaciones más terribles. Considera cómo puedes extender esa misericordia a otros, especialmente a aquellos que pueden parecer inmerecidos a tus ojos, así como Jonás luchó con la idea de la misericordia de Dios para Nínive.
Reflexión
¿De qué manera has experimentado la misericordia y la redención de Dios? ¿Cómo puedes ser un recipiente de su misericordia para los demás? Piensa en alguien en tu vida que necesite experimentar la misericordia de Dios y planifica una manera de mostrársela esta semana.
- ¿Cómo puedes relacionarte con los sentimientos de desesperación y aislamiento de Jonás?
- ¿De qué maneras has sido testigo de la presencia de Dios durante tus días más difíciles?
- ¿Qué crees que Dios quiere enseñarte a través de tu sufrimiento
- Reza por una comprensión más profunda de la misericordia de Dios.
- Reflecciona sobre cómo puedes extender esa misma misericordia a los demás.
Oración
"Dios redentor, gracias por tu misericordia y por la forma en que me rescatas y me redimes. Ayúdame a confiar en tu poder para sacar el bien de cada situación y a compartir tu misericordia con los demás, incluso cuando es difícil. Dame la gracia de ver a los demás como Tú los ves, dignos de amor y compasión. Amén.