Mi hija tiene 9 años y he estado trabajando con ella en su enfoque. A veces le pido que ordene su cuarto y después de un tiempo la encuentro jugando con un juguete que se encontró mientras ordenaba. La mitad del cuarto está ordenado pero la mitad no lo está. Perdió el enfoque, se distrajo y se quedó jugando. O a veces estamos jugando un juego de mesa y puedo ver que ella no está poniendo atención cuando es su turno. Le tenemos que decir: "Emma, ¡enfóquese en el juego!" Lo que más me da risa es que mi mamá me dice que yo era igual de niña.

Según diferentes definiciones, enfocarse significa: dirigir la atención o el interés hacia un aspecto. Estar enfocado es el acto de mantener nuestra atención en una actividad en particular, eliminando por completo cualquier tipo de distracción que pueda desviar o captar dicha atención. Siempre vamos a tener la mirada puesta en algo o vamos a estar enfocadas en algo. El problema es que pasamos mucho tiempo enfocadas en nuestros problemas, en las circunstancias difíciles, en la situación de un país, en la nueva moda, en lo que me dijo o hizo alguien, en mi pecado, en mi cuerpo, en mi salario etc. No es que estas cosas no merecen nuestra atención, pero no estamos fijando nuestra mirada y nuestro enfoque en lo que verdaderamente es importante.

El autor de Hebreos nos anima a fijar nuestra mirada en Jesús. Cuando estamos enfocadas en las cosas terrenales, quitamos la mirada de Dios y magnificamos o hacemos más grandes las cosas en las cuales estamos enfocadas, haciendo a Dios más pequeño. Pero cuando tenemos nuestra mirada puesta en Jesús, y nuestro enfoque está en Dios, todas estas cosas terrenales, no es que ya no existan, o que no estén ahí o que no sean reales, sino que las ponemos en la perspectiva correcta y el lugar adecuado.

Así como yo le ayudo a mi hija a enfocarse (y mi mamá me ayudó a mi también), necesitamos ayudarnos unas a otras y recordarnos la importancia de enfocarnos en nuestro Padre, en su palabra y en lo que es eterno. Este boletín nos va a ayudar a hacer exactamente eso, ¡a fijar nuestro enfoque en lo que verdaderamente es importante!

Como dice el antiguo himno: "Fija tus ojos en Cristo tan lleno de gracia y amor y lo terrenal sin valor será a la luz del glorioso Jesús".

Con mucho cariño,

Nathalie Richard

Este mes, vamos a leer cinco pasajes que exploran un aspecto importante de la visión para nuestro camino espiritual. Puede elegir uno por semana para centrarse en él. No se apresure, sino que tómese tiempo para leer, escribir en su diario y orar sobre cada pasaje. ¿Cómo le animan y desafían estos pasajes?

Hebreos 12:1-3: Fijar nuestro enfoque nos ayuda a perseverar contra el pecado y durante el sufrimiento.

Todos estamos en un camino espiritual y enfrentaremos muchos obstáculos en el camino. El autor del libro de Hebreos comprende lo difícil que será el proceso, por lo que nos desafía a desprendernos de todas aquellas cosas que pueden agobiarnos y hacernos tropezar en el camino, y nos señala la única cosa que hace posible la perseverancia.

"Esto lo hacemos al fijar la mirada en Jesús, el campeón que inicia y perfecciona nuestra fe."

Mateo 6:19-34: Fijar nuestro enfoque nos ayuda a no dejarnos vencer por las preocupaciones de este mundo.

Si nos enfocamos en nuestras preocupaciones, ansiedades y problemas, esas cosas pasan a primer plano y hacen difícil ver cualquier otra cosa. Del mismo modo, cuando nos centramos en las cosas buenas que queremos en este mundo, éstas también pasan a primer plano y se convierten en todo lo que podemos ver, difuminando todo lo demás. Este pasaje nos aporta claridad al desafiarnos a buscar activamente y poner la vista en la única cosa que hará que todas las demás cosas estén es su lugar adecuado.

"Busquen el reino de Dios por encima de todo lo demás y lleven una vida justa, y él les dará todo lo que necesiten."

Salmo 27: Fijar nuestro enfoque nos da una esperanza confiada en tiempos de temor y problemas.

Cuando los problemas nos rodean y el mundo parece estar en contra nuestra, es fácil preocuparse y ceder al miedo y a nuestros deseos de control, seguridad e incluso venganza. Sin embargo, frente a sus enemigos, David le pide al Señor una cosa.

"Lo único que le pido al Señor —lo que más anhelo— es vivir en la casa del Señor todos los días de mi vida, deleitándome en la perfección del Señor y meditando dentro de su templo."

Salmo 37: Fijar nuestro enfoque nos ayuda a desear correctamente.

A menudo malinterpretamos y aplicamos este versículo, convenciéndonos de que cuando demostramos nuestro deseo por el Señor, Él nos dará todo lo que queramos. Pero la verdad de este verso es que cuando deseamos al Señor, Él alineará los deseos de nuestros corazones con lo que Él desea para nosotros.

"​​Deléitate en el Señor, y él te concederá los deseos de tu corazón."

Colosenses 3:1-16 Fijar nuestro enfoque nos recuerda cuál es nuestra realidad espiritual mayor.

Cómo vivimos entre la primera venida de Cristo y la segunda, es fácil perder de vista la realidad espiritual mayor que existe, pero que aún no se ha manifestado plenamente en nuestras vidas. Y cuando lo hacemos, podemos caer en viejas formas de pensar y vivir.

"Ya que han sido resucitados a una vida nueva con Cristo, pongan la mira en las verdades del cielo, donde Cristo está sentado en el lugar de honor, a la derecha de Dios."

Tome un tiempo para escuchar y meditar en la letra de esta canción: Fija tus ojos en Cristo y El más grande amor

1.Tómese un tiempo para reflexionar sobre el último año. ¿En qué cosas ha estado hiper- centrada? Estaba distraída por:

• Sus circunstancias (salud, un trabajo, una relación, el estado de nuestra cultura/país/gobierno, o su seguridad financiera).
• Su propio pecado
• El sufrimiento (suyo o de otros)

¿Qué obtuvo la mayor parte de su atención?

1. Su atención e imaginación están dondequiera que ponga su mirada. Esto, a su vez, informa lo que piensa y cree, así como la forma en que vive en base a esas creencias. ¿Cómo se han moldeado sus pensamientos y acciones de acuerdo a los que ha estado enfocada este último año?
2. Las cosas en las que uno se enfoca, se magnifican. ¿En qué cosas está enfocada? ¿Han disminuido estas cosas su enfoque en la eternidad y en la herencia espiritual que tiene en Cristo o lo ha magnificado? ¿Cómo?

1.Al evaluar en qué se ha estado enfocando y cómo le ha impactado, es importante que se pregunte qué pasos debe dar para realinear su enfoque y poder ver con claridad.

• ¿Qué ha ignorado que necesita reenfocar? ¿Qué necesita hacer para redirigir esa energía? ¿A quién le puede pedir ayuda? ¿A quién necesita pedirle perdón?
• ¿Hay alguna relación que se haya visto dañada por su falta de enfoque y atención? Si es así, ¿qué pasos tiene que dar para enmendar la situación?
• Si las cosas de este mundo han ahogado lo que realmente importa y le han hecho perder el enfoque, ¿qué pasos puede dar para reorientar su corazón hacia Dios y su palabra? ¿Cómo va a convertirlo en una prioridad? ¿Quién puede ayudarle

1. Aprendimos de los pasajes bíblicos que fijar nuestro enfoque nos ayuda de cinco maneras específicas. Identifique una o dos áreas en las que su enfoque necesita ser ajustado.

Fijar nuestro enfoque:

• Nos ayuda a perseverar contra el pecado y durante el sufrimiento.
• Nos ayuda a no dejarnos vencer por las preocupaciones de este mundo.
• Nos da una esperanza confiada en tiempos de temor y problemas.
• Nos ayuda a desear correctamente.
• Nos recuerda cuál es nuestra realidad espiritual mayor.

Escriba una respuesta en forma de oración que incluya pedirle a Dios que renueve su deseo por Él y el valor para dar los pasos necesarios para aclarar su enfoque espiritual

1. El lugar donde fija su mirada la puede llevar a un deseo que se alinea con la voluntad de Dios o con nuestra carne. Lea Génesis 3. ¿Qué papel jugó el enfoque de Eva en sus pensamientos y acciones?

Consulte nuestro boletín de Ezer Equipada del mes de Noviembre, Sea Sostenida. Encontrará ideas prácticas y recursos para ayudarle a reorientar su mirada hacia Cristo.