Ezer Equipada: Cansancio
El mes pasado vimos un partido de fútbol de Costa Rica contra Estados Unidos. ¡Disfrutamos mucho y también tenemos un poco de tensión familiar porque algunos de nosotros vamos con Costa Rica y otros con Estados Unidos! Me llamó la atención un comentario del analista cuando dijo: "El equipo de Costa Rica se ve cansado, no está inspirado y le faltan nuevas ideas." No me gustó el comentario porque hablaba de mi equipo pero si soy honesta hay algo de verdad en esto.
Aún en mi propia vida puedo ver reflejado este comentario (¡no sólo en los jugadores de fútbol!). A veces me siento cansada, con falta de inspiración y de nuevas ideas. De hecho, me estoy tomando una taza de café mientras escribo esta parte del boletín porque me siento cansada para escribir! He percibido cansancio en conversaciones que he tenido con muchas personas. Mujeres que se sienten sin energía, desanimadas, agobiadas, abrumadas, débiles y exhaustas. Me parece que el cansancio o agotamiento es algo que como mujeres experimentamos mucho, especialmente con tantas demandas y expectativas cotidianas.
Hay muchas razones por las que podemos sentirnos cansadas, pero este mes vamos a analizar cuatro categorías generales: el cansancio por nuestro propio pecado, el cansancio por servir sacrificialmente, el cansancio por el ajetreo o las muchas ocupaciones y el cansancio por el sufrimiento provocado por vivir en un mundo roto. Para hacerlo aún más complejo, estas categorías están profundamente interconectadas y se alimentan unas a otras. Por ejemplo, cuando está cansada de una larga temporada de servicio sacrificado, el cinismo, la autoestima o la amargura pueden salir a la superficie cuando su trabajo parece no ser reconocido, ni apreciado, ni fructífero. Esto puede llevarla a alejarse de aquellos a los que originalmente buscaba amar y servir. O tal vez, el ajetreo y la tiranía de lo urgente la llevan al punto de agotamiento total y en lugar de reevaluar sus prioridades y crear un margen, se entrega a un sentido de derecho y se excede en la comida, las redes sociales o la televisión. O tal vez está atrapada en un patrón de pecado habitual y está cansada de tratar de manejarlo y sus consecuencias, lo que la deja en la vergüenza, la desesperación y el aislamiento de Dios y de los demás. Tal vez, está abrumada y cansada de todo el sufrimiento y el quebrantamiento en el mundo de hoy, pero en su cansancio se ha vuelto impaciente y de mal genio con los que la rodean.
La buena noticia es que podemos encontrar descanso en Dios. Él provee fuerzas para el cansado, aliento para los desalentados, restauración, renovación y un lugar de descanso. Dios quiere y nos invita a que vayamos a Él cuando nos sentimos cansadas. "Luego dijo Jesús: Vengan a mí todos los que están cansados y llevan cargas pesadas, y yo les daré descanso" (Mateo 11:28). ¿Está acudiendo a Jesús en medio de su cansancio? La invito a usar este recurso para profundizar en la fuente de su cansancio, cómo responder y buscar descanso en Él.
Con cariño,
Nathalie Richard
Lea
Este mes, exploraremos cuatro formas diferentes en que podemos experimentar el cansancio. Puede ser bueno concentrarse en una sección a la vez, ya sea leyendo una por semana o una cada dos días. A medida que lea, fíjese en la fuente, o la razón del cansancio, y en cómo Dios invita y renueva cada uno.
Cansancio por nuestro propio pecado:
El pecado y sus consecuencias son mucho para manejar. Y manejar nuestro pecado puede llevarnos al cansancio. En estos pasajes, vemos el efecto que el pecado de David tiene sobre él. Dios invita a David a la confesión y al arrepentimiento, lo que finalmente lleva a su restauración.
"Ten misericordia de mí, oh Dios, debido a tu amor inagotable; a causa de tu gran compasión, borra la mancha de mis pecados. Lávame de la culpa hasta que quede limpio y purifícame de mis pecados. Pues reconozco mis rebeliones; día y noche me persiguen."
Cansancio por servir:
Elías fue un profeta del Señor que, sin ayuda, se enfrentó a todos los profetas de Baal y fue testigo de cómo el Señor se manifestaba con un notable despliegue de Su poder. Pero en su cansancio, Elías dio paso al cinismo y a la autocompasión. Pero el Señor salió a su encuentro en aquel lugar y lo colmó de tierna compasión.
"Luego siguió solo todo el día hasta llegar al desierto. Se sentó bajo un solitario árbol de retama y pidió morirse: «Basta ya, Señor; quítame la vida, porque no soy mejor que mis antepasados que ya murieron». Entonces se acostó y durmió debajo del árbol."
Cansancio por el ajetreo:
A veces desordenamos nuestras prioridades, nos distraemos y descuidamos las cosas que nos renuevan. Sin duda, Marta quería servir bien a Jesús, por lo que se ocupó de muchos detalles, lo que no sólo la llevó al cansancio, sino también a la amargura y la frustración con los mismos a quienes quería servir. Pero el Señor invitó a Marta a reevaluar sus prioridades y a recibir de Él, donde podría renovarla en cuerpo y alma.
"Pero Marta estaba distraída con los preparativos para la gran cena. Entonces se acercó a Jesús y le dijo: —Maestro, ¿no te parece injusto que mi hermana esté aquí sentada mientras yo hago todo el trabajo? Dile que venga a ayudarme."
Cansancio por el sufrimiento:
Toda la creación gime bajo la carga y los efectos continuos del pecado. Isaías destaca el cansancio del sufrimiento: un mundo marcado por lugares desolados, los desiertos y tierras baldías. Pero en medio del lamento, Isaías invita a Israel a fortalecer a los que tienen las rodillas débiles y a animar a los que tienen las manos cansadas, porque el futuro descanso de Dios es seguro y llegará en plenitud.
"El cojo saltará como un ciervo, y los que no pueden hablar ¡cantarán de alegría!
Brotarán manantiales en el desierto y corrientes regarán la tierra baldía."
Escuche
Escuchar la verdad de Dios en forma musical nos recuerda quién es Dios y puede refrescar y renovar nuestras almas cansadas.
Canciones en Spotify de nuestra Iglesia (en Español).
Canciones en Spotify: lista que el equipo de Ezer creó. (en Inglés).
Conéctese
Cuando aparece el cansancio, ¿se retrae y no habla o habla con ira y frustración? ¿Es temerosa, controladora o cínica? ¿Cómo se manifiesta el cansancio en usted? ¿Cuáles son algunos de los indicadores que le permiten saber que está realmente cansada?
Hay muchas razones para nuestro cansancio. Estamos analizando cuatro categorías específicas. Considere qué puede estar contribuyendo a su cansancio en esta temporada. Recuerde, estas pueden estar integradas y una puede llevar a la otra:
- Podemos estar cansadas de nuestro propio pecado.
- Podemos estar cansadas de servir sacrificialmente. De hacer el bien.
- Podemos estar cansadas del ajetreo diario o por estar muy ocupadas.
- Podemos estar cansadas del sufrimiento.
Los pasajes de lectura anteriores nos ayudan a ver cómo Dios ofrece cuidarnos en nuestro cansancio. Incluso Jesús buscó refugio en el Padre y se retiró a lugares tranquilos para renovar su mente, descansar su cuerpo y conectarse con su Padre.
- En nuestro cansancio por nuestro propio pecado Dios nos invita a arrepentirnos y ser restauradas.
- En nuestro cansancio por servir sacrificialmente o hacer el bien, Dios nos invita a descansar y a recuperarnos.
- En nuestro cansancio por el ajetreo y las ocupaciones, Dios nos invita a reevaluar y recibir.
- En nuestro cansancio por el sufrimiento, Dios nos invita a lamentarnos, a recordar Su fidelidad y a refugiarnos en Él.
Su cansancio es una invitación a recibir el cuidado de un Padre que la ve y anhela ser bondadoso con usted. ¿A qué la invita Dios a través de su cansancio? ¿Cómo completaría esta frase? En mi cansancio de ________, Dios me está invitando a _____________________.
Muévase
En esta sección, hemos incluido posibles pasos que puede dar en función del tipo de cansancio con el que más se identifica. La animamos a que los haga en comunidad con otros.
Arrepiéntase:
Si está experimentando cansancio por el pecado habitual, considérelo una invitación para arrepentirse y volverse a Cristo. Al leer este breve pasaje de Isaías 30:15-18, busque la invitación, el rechazo y el recordatorio que el Señor da.
"Esto dice el Señor Soberano, el Santo de Israel: «Ustedes se salvarán solo si regresan a mí y descansan en mí. En la tranquilidad y en la confianza está su fortaleza; pero no quisieron saber nada de esto. “No—dijeron ustedes—, nuestra ayuda vendrá de Egipto; ellos nos darán caballos veloces para entrar en batalla”. Sin embargo, la única velocidad que verán ¡será la de sus enemigos dándoles caza! Uno de ellos perseguirá a mil de ustedes y cinco de ellos los harán huir a todos. Quedarán como un asta de bandera solitaria sobre una colina o como un estandarte hecho jirones en la cima de un monte lejano». Así que el Señor esperará a que ustedes acudan a él para mostrarles su amor y su compasión. Pues el Señor es un Dios fiel. Benditos son los que esperan su ayuda."
El pecado nos cansa. ¿Con qué pecado está luchando actualmente? ¿En qué se apoya en su cansancio? ¿A qué se dirige en lugar de a Dios? La invitación que nos hace Dios, incluso en nuestro pecado, es que nos volvamos a Él. ¿Qué le impide acudir a Él? ¿Qué consuelo y ánimo le da este pasaje?
Descanse y Reevalúe:
Si el cansancio que experimenta es causado por el servicio a los demás o por el exceso de trabajo, considérelo una invitación a reevaluar y recibir lo que Dios tiene para usted. En los dos ejemplos de Elías y Marta, Dios los reorienta a lo que es verdadero y les proporciona lo que necesitan. Para Elías, fue comida, sueño y el estímulo de que no estaba solo. Para Marta, no fue una condena, sino una invitación a descansar y recibir. Hemos creado un vídeo y una guía para ayudarle en el proceso de reevaluar, establecer un margen y recibir descanso y renovación.
Lamente:
Si el cansancio que experimenta es causado por el sufrimiento, considérelo una invitación a lamentarse. A menudo pensamos en el agradecimiento en esta época del año, y aunque la disciplina espiritual de la gratitud es un bálsamo para nuestras almas cansadas, la disciplina espiritual del lamento es igualmente importante. Cuando lamentamos, nombramos el sufrimiento y el dolor que estamos experimentando y clamamos a Él por ayuda. El lamento da lugar a la gratitud al recordar Su fidelidad hacia nosotros. El Diario de Gratitud y Lamento de Ezer le ofrece una guía paso a paso para ayudarle a practicar estas disciplinas. Puede imprimirlo en el enlace anterior o recoger uno en su sede.
Escuche:
Pase tiempo en algún lugar a solas escuchando las verdades de la música que recomendamos en la sección de "escuche". Puede que tenga que ser creativa. Escuche las canciones mientras se baña, mientras maneja o salga a caminar y escúchelas. Encuentre una canción en esta lista que le recuerde las verdades que más necesita escuchar en esta temporada e incorpórela a su día, escuchándola cada vez que necesite refrescarse, refugiarse o descansar. Observe qué canciones resuenan más con usted y fíjese si nota algún tema en común. Las canciones con las que se conecta le dan una indicación de las verdades que su alma necesita escuchar.